El templo católico fue obra de los sacerdotes Vicentinos José Villanea, Julio Calás Joaquín Puyo, Víctor Cabal José Pron y Luis María Castillo que llegaron a Tame en 1.915.
En 1.956 se encargaron de la parroquia los Sacerdotes Javerianos, destacándose Jesús Alfonso Gómez que lideró en 1.975 la construcción del nuevo templo ubicado en el costado nororiental del Parque General Santander. Amplio templo con 3 grandes puertas metálicas sin vidrio a los lados y un atrio a su entrada principal, cuenta con una capilla que permanece disponible las 24 horas para feligreses. Su nombre es en honor a la patrona del municipio.